jueves, 29 de septiembre de 2022

Mandando al gato a su cama

 Si se los acostumbra desde pequeños, ellos serán dóciles para ir a dormir. Cuando llega cierta hora de la noche, cierro sus platos de comida con su tapa, levanto a los dos gatos en mis brazos, los acaricio y los pongo sobre su almohadón. Listo, no se mueven de ahí hasta el otro día.

Los animales necesitan la rutina, los hace sentirse seguros y atendidos.

lunes, 19 de septiembre de 2022

Cuando el perro come

 Si es un perro de otra persona, si es de la calle, más vale que hagas una curva en tu camino porque, aunque no te interese su comida, el perro te va a gruñir o lastimar si pasas cerca, él no sabe qué es lo que vas a hacer. Es instinto.

Si es tuyo, no debe siquiera gruñir. Tiene que estar acostumbrado a que le manipules la comida cuando lo veas necesario, porque alguna vez puedes estar salvándole la vida. Mis perros, incluso, si les digo "¡no comas!", dejan de hacerlo.

Educación, qué palabra tan fantástica para todo el mundo.

domingo, 18 de septiembre de 2022

Llevando a mi gato a una nueva casa

 Para que un gato, que es muy territorial, acepte vivir en una nueva casa sin querer irse a la casa anterior, no lo dejes salir por un buen tiempo. Tómate por lo menos de cuatro a seis meses. No es malo si dentro de la casa tiene libertad y todo lo que necesite, además del amor de siempre.

Lleva un tiempo, si, pero por suerte se adapta y termina por aceptar ese nuevo hogar, si todo lo demás sigue siendo igual para él.

viernes, 16 de septiembre de 2022

El mejor perro para un niño

 Los niños que tienen un perro para acompañarlos, se crían más alegres, responsables, considerados y afectuosos. Cualquier perro sirve. Es importante que lo tenga desde muy cachorrito, para que ambos se críen en igualdad de condiciones, casi como hermanitos, ya que el perro muy pequeño ve al niño como su par. Que no sea demasiado pequeño en tamaño ni demasiado grande, al menos para empezar a familiarizarse con este tipo de nuevo amigo.

Si vas a elegir una raza, los labradores retriever tienen justa fama de niñeros tolerantes, compañeros, serviciales y juguetones. Es de talla mediana, ideal para que crezca junto al niño en forma más o menos igualitaria, y de boca blanda (característica típica de esta raza) lo que lo hace prácticamente perfecto para acompañar a su crecimiento. Dan la vida por esa criatura que han puesto a su cuidado.

Aunque insisto, cualquier perro tratado con amor, traído a casa desde cachorrito, será el compañero más amado y amante de tu hijo.

jueves, 15 de septiembre de 2022

Paseando con nuestro perro

 Siempre miro al conjunto de perro-dueño paseando por la calle, y acto seguido miro al perro, a la persona la miro en tercer lugar. No dejo de reírme interiormente cuando veo al conjunto de correa tensa e inevitablemente me digo a mí misma, "ahí va un perro paseando a su humano".

También veo situaciones en las que puedo decir "persona queriendo pasear a su perro".

Son muy pocas las veces en donde puedo decirme, al ver esos conjuntos, "ahí van paseando, perro y persona".

Como amante de los perros e instructora de los míos, afirmaré siempre que un paseo debe ser algo agradable para los dos, no un sufrimiento de uno por imposición del otro, cualquiera de los dos que sea. Al perro, como a los niños, hay que enseñarle a andar por la calle, junto a uno, no delante ni detrás. Junto, esa es la voz. Enseñarles a andar, preferentemente a nuestra izquierda, con el hombro de ellos cerca de nuestra pierna, con la correa justa y floja, lleva su tiempo y su paciencia, se les enseña de cachorro, también de adulto se le puede enseñar, con una cuota extra de paciencia. Es un trabajo que redunda en grandes beneficios, en donde pasear ambos se convierte en un placer compartido.

He escuchado muchas veces a personas amigas y familiares decir que su perro "¡tiene tanta fuerza…!" para explicar el hecho de ser arrastrado por ellos. Todos sabemos que no es la fuerza, sino la falta de educación del animal, de esa manera es muy peligroso salir con nuestra mascota a la calle porque, ¿qué hacemos cuando, con su fuerza superior a la nuestra corre y daña a alguien o algo? No es la fuerza, repito, es la educación.

Si no podemos o no sabemos educar a nuestro perro para andar en forma educada y decente por la calle, hay que pedir consejo o ayuda a quien nos pueda enseñar a enseñarle.

miércoles, 14 de septiembre de 2022

Fiesta de sapos

 Me gustan las ranas y los sapos, son muy benefactores de nuestros jardines y huertas, son inofensivos y hasta son comunicativos.

Habiendo tenido como mascota a Sansón, durante muchos años, un sapo del cual conté en una entrada anterior, pasó un tiempo sin tener más sapos ni ranas en casa, así que le pedí a un amigo que tiene una casa con gran parque en el Bosque, que me trajera dos o tres.

El muy bárbaro me trajo diecisiete. ¡17! Los acepté a todos, obviamente. Esa tarde fue una fiesta en casa, con mis hijos y mi nuera fotografiándolos, examinándolos encantados, todos felices, fue muy divertido con el "saperío" saltando por todos lados.

La colonia de sapos vivió bastante tiempo en mi patio hasta que se fueron yendo y hoy sólo quedó Pericles, fiel y siempre presente, como anteriormente lo estuvo Sansón.

domingo, 11 de septiembre de 2022

Las despedidas

 Todas las despedidas de mis animales queridos fueron difíciles, muy difíciles, desgarradoras. Quien tiene mascotas que forman de verdad parte de la familia, sabe a lo que me refiero.

La diferencia con Diana se debió a que, además de ser nuestra gata, era la gata, era una institución, y si bien era de todos nosotros, tenía una estrecha relación con mi hijo, quien la entrenó para ayudarle a crear un carácter especial, de aquellos que hacen que una gata pueda perseguir a un perro grande de la calle, despavorido y aullando. Ah, sí, así de brava era Diana.

Blanca e inmaculada como la espuma, la amamos como lo que era: toda una presencia, una personalidad propia. Vivió desde su mes de vida hasta sus 16 años con nosotros, creando millones de anécdotas inolvidables. Contrajo, un par de meses antes de su partida, un asma felina que hizo que yo la llevara seguido al veterinario para que le quitara medio litro de líquido de sus pulmones, cada vez.

Comenzó a adelgazar mucho, ya que no podía comer, se ahogaba al no respirar bien. Me levantaba a cada hora durante muchas noches, obsesionada con la idea de darle, en su boca, una pequeña albóndiga de carne, llegaba a comer una sola, raras veces dos, y las albóndigas se hacían cada vez más pequeñas. Vivía mortificada pensando en mi hijo, en ese momento allá lejos, en Madrid, sabiendo que sería duro para él también.

Al volver a llevarla al veterinario, me largué a llorar. No podía verla sufrir así. El médico, con una suave sonrisa y resignación, aceptó mi ruego de ponerla a dormir. Diana se fue con mucha placidez, con una de mis manos en su hocico para que me oliera todo el tiempo y la otra mano acariciando su suave pelo. Hoy está en mi jardín, en donde le gustaba echarse siempre, junto al jazmín del cabo, tan blanco como ella.

Cuando le dije a mi hijo que Diana había fallecido, comenzó a salirle cabellos blancos sobre su melena renegrida y ensortijada, todas agrupadas a un lado de su frente. Nunca quiso teñirse ni disimular ese mechón. En su ilusión le gusta creer que Diana, al irse, pasó a despedirse y lo rozó con la cola, dejándosela ahi.

miércoles, 7 de septiembre de 2022

Un juguete peligroso

 Me refiero a este:

Entiendo que hay gente que "nunca tuvo problemas", y muchas otras me han dicho que vivieron algo parecido a mi experiencia, el susto que viví no quiero ni pensarlo, tal vez si lo cuento, escribiéndolo aquí, pueda sacudirlo un poco de mi mente.

Muchas veces, a través de mis años con perros, les he comprado este enorme "hueso" de cuero de vaca prensado, para que se entretengan unos minutos. Digo unos minutos porque los dientes de un ovejero alemán no tienen piedad para jugar, desgarrando alegremente el juguete que le has regalado: son como niños, felices y dedicados en romper el obsequio que les das.

Mi actual perro, obviamente, recibió uno. Doy gracias a los dioses, las ninfas, los truenos y centellas que yo estaba junto a él, sentada en mi pc, mientras lo oía mordisquear. Cuando dejé de oírlo, no le di importancia, hasta los perros se cansan de jugar. Sólo sentí que sus pisadas iban y venían sobre la madera del piso flotante.

Hasta que empecé a escuchar un sonido ululante, propio del asmático que quiere respirar y no puede. Alarmadísima, me levanté como un rayo y corrí hacia el perro, que seguía respirando a duras penas, con ojitos de auxilio. Le abrí la boca y ya lejos, casi sobre la garganta, se lograba ver un tubito de cuero largo que se le iba yendo atrás cada vez más, con cada inspirar.

Le metí la mano rápidamente en la bocaza abierta de par en par y con la punta de los dedos, a duras penas, logré extraer ese rollo de cuero de unos 20 centímetros de largo por dos centímetros de ancho. La bocanada de aire libre de mi perro aliviado casi me hizo llorar.

Me temblaron las piernas un buen rato, y aún me acuerdo, pensando… "¿Y si yo no estaba ahí?".

Cruz diablo con ese juguete del averno.

martes, 6 de septiembre de 2022

La raza de Snoopy

 Snoopy es un Beagle, pequeño, redondito y siempre con aspecto infantil.

Es el Beagle más famoso del mundo, fue creado por Charles Schultz, para Charlie Brown, es el primer perro de esta raza con una estrella en el Paseo de la Fama.

El tipo de carácter también es de esta raza, la intención de su creador fue esa: Beagle. Prueba de ello está en el diseño original, cómo ha ido evolucionando:

Además, el mismo Schultz lo ha dicho siempre.

He aquí una foto muy graciosa y oportuna, en donde la punta de la lengua del perrito terminó de construir la silueta. 😆

Los beagles son perros compactos y musculosos con un cráneo ligeramente abombado, tienen la mandíbula más bien cuadrada y la trompa ancha. Lleva orejas largas y colgantes, el pechito es profundo y la espalda es derechita. El pelo es corto, suave y denso y suele ser negro, pardo y blanco. Los dibujos se simplifican, optando por el blanco-negro.

Son perros cariñosos pero con carácter, aman la compañía de su dueño y también les gusta estar solos a sus anchas. No son guardianes, solamente pueden ladrar, mover la cola y ante los extraños, gruñir. Eso es todo. Muy Snoopy.

Jugando con insectos

 Con moscas y abejas y avispas, también persiguen pajaritos, mariposas, todo lo que vuela. Es un juego para nuestras mascotas. Como cuando los gatos persiguen y cazan las lucecitas laser que proyectamos sobre el piso y la pared.

No debo comer avispas.
No debo comer avispas.
No debo comer avispas.
No debo comer avispas.

sábado, 3 de septiembre de 2022

¿Por qué mis perros duermen panza arriba?

 Porque están felices. Se sienten bien, libres de estrés y sin problemas de salud. Puede ser en verano, en invierno, no importa la estación del año. Un perro que duerme panza arriba no tiene frío ni dolor, ni hambre ni miedo. Está pleno.

Se siente seguro porque sabe que nadie, en su entorno, lo sorprenderá para mal. Ni siquiera lo sorprenderá. Confía en todos y por eso expone todo lo vulnerable y sensible que tiene, su cuello, su panza, sus genitales. Sabe que lo respetarán.

Que un perro duerma panza arriba habla de lo bien que se siente en esa casa.

Dormir en mi cama

 Hay personas que sienten que sus merecen dormir en sus camas y claro que lo merecen, merecen eso y mucho más.

Pero no dormirán en mi cama nunca. Es mi cama. Ellos tienen la suya. Respetando el espacio de cada uno la vida transcurre sin sorpresas de salud y sin complicaciones domésticas. Me gusta mi cama perfumada y a ellos les lavo sus colchones muy seguido para que los disfruten suaves, mullidos y duerman desparramados.

Que cada dueño de mascota haga uso de su derecho, es absolutamente personal y respetable. El mío es éste y todos contentos en casa.

Perros con garantías

 Un perro con buenas características garantizadas es éste.

Porque no hay nada garantizado en seres vivos. Tuve un ovejero malísimo con el mundo entero, no dejaba que nadie le pisara la raya, había que tenerlo a resguardo cuando venía gente, era fiel sólo a mí y con ojos para vivir por mí; sin embargo era una dulzura con mi gata, de hecho dormía con ella sobre sus costillas y era gracioso verla subir y bajar al ritmo de la respiración del perro.

Tengo un ovejero que es casi un peluche gigante y debo —qué pena— cuidar mucho mis gatos porque se los quiere comer, sin contemplaciones.

Ergo, no hay garantías.

Posiblemente tengas, sea la raza que sea, mucha suerte porque vas a traer un cachorrito a la casa que se criará con los gatos —ya territoriales y dueños "antiguos"— y los respetará. O al menos los gatos se harán respetar, eso seguro. Es la ventaja de los "mayores".

No hay raza que te pueda recomendar porque la que le resultó buena a uno le resultó un intolerante felino al otro. Diría que los mestizos están más propensos a llevarse bien con otras especies por su condición de callejeros.

Mi consejo sería: elige el perro que te guste a vos. Lo demás será educación, paciencia y amor. Podría incluso decir que los golden retriever tienen justa fama de sociables y ojalá sea así, porque hay otros que conocí de carácter mucho más inquieto.

Soy una convencida de que cualquier perro puede resultar maravilloso.

Mi perro ansioso mordisquea

 Mi ovejera, desde que la trajimos —y desde antes— a sus cuatro meses de vida, era hiper nerviosa. No mordía pero quería agarrar con la boca la mano que intentaba acariciarla, de torpe y de nerviosa, justamente. Calculamos que adquirió ese nerviosismo e inseguridad que ya trae innato, acrecentado por estar sus primeros cuatro meses entre todos sus hermanos y padres, en medio de la ley del más fuerte a la hora de la comida y de las actividades.

Hubo que enseñarle a comer despacio porque era una tragona peligrosa, no respiraba para comer, no estaba bien. Pudimos solucionar muy bien eso con una artimaña que explico aquí:

Cómo comer despacio

No obstante la perra, ya adulta seguía siendo hiperactiva y nerviosa. Confieso que llegaba a cansar un poco a pesar de toda mi enorme paciencia.

La idea genial la tuvieron mi hija y mi yerno, una vez que yo estaba de viaje y ellos atendían a mis animales en mi ausencia. Hicieron entrar a la perra a la cocina, dejando al macho afuera y la hicieron acostar a pura caricia a todo lo largo de su cuerpo. Sentados los dos en el piso la acariciaron lenta y tranquilamente durante media hora sin parar, hablándole suave y conversando entre ellos. La hicieron su reina del momento.

¡El cambio fue notorio! La perra, sintiéndose atendida a ella sola sin nadie que le hiciera competencia, sintiéndose mimada y tenida en cuenta, adquirió una paz que le desconocí al volver. Durante varios días le hicieron este tratamiento de caricias.

Hoy en día sigue siendo hiperactiva, es su naturaleza, contra eso no se puede, pero sabe que está en una casa segura, en donde nadie la va a agredir, ni sorprender desagradablemente, y en donde sabe que la queremos. Es una obediente perra que se pasa horas echada a nuestros pies, siempre atenta a lo que hacemos para seguirnos.

Por supuesto, aunque ya no tan largas, las caricias las recibe a diario. Adiós tarascones en el aire.

Gatos: hora de ir a la cama

 Cuando llega cierta hora de la noche, cierro los platos de comida con su tapa, levanto a los dos gatos en mis brazos, los acaricio y los pongo sobre su almohadón. Listo, no se mueven de ahí hasta el otro día.

Los animales necesitan la rutina, los hace sentirse seguros y atendidos.

¿Qué perros nos aman más?

 Estos:

Este también:

Pueden ser éstos:

Estos también podrían ser:

Y también todos estos:

En definitiva, cualquier perro al que adoptes bajo tu cariño, tu protección, tu compañía y atenciones. Si lo quieres, te querrá, pase lo que pase. No hay amor más fiel, sin condiciones.

Mi perro te enfrenta

 El perro te quiere pero no tolera las discusiones en su propio rebaño, es normal, los gritos y los sonidos agresivos son perfectamente captados por los perros.

Mi esposo era muy discutidor y gritón, solía explotar en ira y decir cosas fuertes. Mi fiel perra Dánae, que siempre se echaba a sus pies, se ponía en medio de nosotros dos y cerca de mí, con las patas bien afirmadas en el piso, y le ladraba estentóreamente, con notable tono de reproche y de "¡callate!". Ella lo amaba, era una perra sumamente equilibrada y buena, mas no sumisa ni débil, era muy protectora del rebaño.

A final mi esposo terminaba por callarse mirándola y soltando la risa, porque la situación era bastante graciosa.

A los animales, mucho más que a los seres humanos, les gusta la paz y la defienden.

Sus ojos eran de madre y de paz.

Visitando a amigos

 Si los perros corren, saltan, se persiguen o persiguen pelotas, esta salida cuenta como un paseo. Es un buen complemento de los paseos cuando éstos no se pueden hacer o cuando queremos variar. El tema es que se diviertan y que quemen energía, toda la que puedan, alegremente.

Yo suelo llevar a mis perros a la casa de mis sobrinos para que jueguen con ellos y su perrita, en el patio y al sol.

La memoria de nuestros perros

 La memoria de los perros está clasificada entre las episódicas, esto es, recuerdan situaciones que han vivido, de distinta complejidad, que a ellos les han afectado, especialmente cuando son recientes y las semánticas, es decir, aquellas que le permiten imitar acciones del ser humano que le ha enseñado a asociar una voz u orden a un hecho a realizar, aunque haya pasado un día del evento vivido. Eso hace que los perros sean capaces de actuar de acuerdo a lo que vieron hacer.

Por ejemplo, si el dueño del perro se tira al piso, al decirle al perro "dale" o alguna voz que signifique acción, el perro hace lo mismo: se tira al piso. El perro sabe que con esa voz, debe recordar lo último que hizo su dueño y lo copia. Esa es la memoria semántica. A veces ni necesita la voz: imita y ya.

Otro ejemplo: el perro camina por el patio y el niño escondido, al pasar, lo asusta. Al rato, aunque el niño ya se fue, el perro mira el escondite al pasar y se fija si el niño está. Esa es la memoria episódica. Así también sabe en qué canilla cae agua para beber, quién es el vecino que lo apedrea al pasar, cuánto se enoja su dueño si le rompe las zapatillas.

Y no la puedes borrar, te aviso. No hay manera de que pueda hacerle entender a mi perro que deje de desparramar agua del balde cuando baldeo: imita solito mis acciones de echar agua al patio, juntar la basura, llevar los baldes (semántico) y se acuerda de lo divertido que es mojarse entero (episódico).

Travesuras in fraganti

 Tengo unas cuantas fotos. Suelo andar con el celular en mi bolsillo porque recibo llamadas importantes y eso es oportuno para ir registrando los pequeños detalles que me llaman la atención.

¿Te parece bien in fraganti ver cómo mi perro desgarra el papel higiénico?

¿O pillándolo cuando me destroza la planta nueva recién comprada?

¿O cuando roba el calzado?

¿O cuando me quita y mordisquea la correa especial del aparejo, obligándome comprar otra?

¿Y al volver a casa (suspiro profundamente) y encontrarme con que lo pasa genial en mi ausencia?

A lo mejor te parezca oportuno cuando me deja sin diario para leer.

Es que con una mascota no hay manera de aburrirse. Te lo aseguro, además de mantenerte con las neuronas activas, recibir su amor a raudales y su compañía absolutamente fiel, todas sus travesuras son un precio que vale la pena pagar con mucho gusto.